miércoles, 21 de julio de 2010

Epistolario

Aun recuerdo esos meses,
donde el sol me cantaba desgracias
y tu sonrisa trajo calma a mi vida.
aun recuerdo tu sombra errante

En mi mente yacen frescos los recuerdos
esos que mis ojos pintaron
con lagrimas de noche
noches eternas bañadas en penumbras.

recuerdo cada uno de tus pasos,
ese delicado sonido de zapatos de pasillo.
Aun deambulan frescos en mis oídos
aquella voz que me costo escuchar

recuerdo la llegada del verano
recuerdo la partida de mi inspiración
recuerdo los sueños que fabricaba
con la neblina de las ventanas

fue en un largo viaje por mi memoria
en que martillaste tu mirada fija
en los dulces rincones de mi alma

recuerdo la llegada del otoño
cruel demonio que me atormentas
volví a escuchar tus pasos
a la distancia y lejanos

recuerdo cada minuto,
cada momento,
cada instante, eterno e infinito.
de aquellas dramatizaciones.
un fantasma inerte que acechaba

el soplido de mi alma
iso efecto en mis palabras
a los oídos de mi musa llegaban

cuéntame como te adueñaste de mi corazón

aun están frescas tus primeras palabras
esos recuerdos de invierno
¿sera que el frió nos hace mas cercanos?

llego la primavera
junto con ella tu partida
que dolorosa esa palabra,
también llego la mía

fue en mi exilio
en que comprendí lo que vales
el cuanto me importas
el cuanto te quiero

fue entonces que mis manos escribieron
acaso las palabras
no son mas que el reflejo del deseo del alma

con la llegada del solsticio
llegaron mis días finales
y con eso tus confesiones

dime si fueron sinceras o ingenuas,
dime que no me mentías,
dime que cada bendita palabra
fue verdad.

Con ello llego mi hora final,
la tierra aburrida de mis pasos
me mando a volar lejos,
junto con mis sueños.

El aire era muy liviano ese día,
pero caía sobre nosotros
la insolente mano del sol
entre nosotros reino un dulce silencio.

Ingenuo
un día de verano te vi alejarte
detrás de ti se fueron mis sueños,
hechos trisas.

¿acaso la felicidad esta rodeada por la tristeza?

no tu eres mi felicidad

sigues presente,
a pesar de tus palabras.
dime que es lo que nos esposa,
lo que nos hace uno

¿dime que tan ciertas son tus palabras?

ya pasan años
rondas en mi cabeza a diario
que hermoso se siente eso

a pasado el tiempo y seguirá pasando
se que algún día tomaras mi mano
y las palabras se harán humo en el silencio de nuestros labios.

es tu turno de escribir



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